Sobre Vlinder

POLÍTICA
Vlinder es uno de los dos territorios más conocidos del continente de Hantu. Vecina de la agreste Olut, se caracteriza principalmente por ser una tierra verde de grandes praderas y frondosos bosques, salpicada de pequeñas cordilleras y lagos. Junto al más grande de ellos, el Evatris, se encuentra la capital del reino, Indún, donde el rey Hond gobierna desde hace más de dos décadas. A los ciudadanos de Vlinder se los conoce como vlinderis.

El escudo de armas del país es una kalpana, criatura mitológica con tres cabezas de cabra, león y dragón, respectivamente, dibujada en negro sobre un fondo dividido en cuatro sectores: dos verdes y dos violeta oscuro; que simbolizan por un lado, la riqueza del país en cuanto a recursos naturales y, por otro, la rectitud y nobleza del pueblo de Vlinder, cultivada por sus monarcas y a través de sus leyes y escuelas a través de los siglos. La kalpana, por su parte, simboliza la fiereza inherente a los Vlinderis cuando se trata de defender lo suyo, al tiempo que las tres cabezas identifican a los tres estamentos sociales más destacados: el león representa el poder de la nobleza y clero, el dragón a los guerreros que protegen el país y la cabra al pueblo llano, que cultiva la tierra y fabrica todo lo necesario para que Vlinder prospere.




CREENCIAS

Por una parte, Vlinder es un país politeísta al igual que Olut. Sin embargo, los vlinderis solo creen en aquellas divinidades capaces de influir en sus destinos y en sus actos, no en aquellas que encarnan fenómenos naturales; puesto que piensan que la fuerza de voluntad es lo único capaz de cambiar el mundo y el mundo se creó a partir del equilibrio y el acuerdo de todas las fuerzas divinas que rigen a los hombres.
 
Sith: dios de la guerra.
Serena: diosa de la paz.
Kali: Dios de la fortuna.
Rai:Dios de la suerte.


Por otro lado, desde hace unos 300 años y con la llegada del profeta Azu Mei a través de las montañas del este que separan Vlinder de Sakia, otra parte del enorme continente de Hantu, muchos vlinderis siguen una creencia paralela. El Mei'n We o "camino de Mei", una doctrina basada en la búsqueda del equilibrio y la pureza del alma y sustentado por tres pilares fundamentales que son los que rigen desde entonces las leyes y la filosofía del país: honor, lealtad y valor. Se cree que si alguien consigue alcanzar esas tres virtudes en una proporción adecuada, estará en el camino de Mei'n We y tendrá la templanza vital necesaria para afrontar cualquier cosa, además de tener un sentido exacto de la justicia.


Las leyes y el código del honor Hai-Ma

Para cualquier vlinderi no hay mayor honor que defender los intereses de su pueblo y que este consiga la paz. Desde pequeños, en todas las escuelas, a los jóvenes nativos se les educa en el credo de respetarse unos a otros, ser honestos y decir siempre la verdad. Un vlinderi siempre respetará a un oponente que aplique el mismo código de honor en una lucha justa, pero no así en el resto de casos. Asimismo, la sociedad vlinderi ve con malos ojos actos tales como el robo, la holgazanería o el abuso sobre los demás sin motivo.

Vida marcial

En Vlinder, el hecho de lograr un puesto en el ejército de Su Majestad es un honor por el que muchos matarían. A la hora de ir a la batalla, además, los vlinderis tienen fama de ser tremendamente disciplinados, temiéndose más su valía táctica que el tamaño de sus ejércitos. 

A los enemigos que luchan con valor y caen prisioneros se los juzga siempre antes de dictar sentencia, pues se considera que su actitud ha sido honorable defendiendo sus propios intereses. Sin embargo, esta regla no se aplica a malhechores, ladrones o incluso mercenarios. Es cierto que, en tiempos de guerra desde hace algo menos de cincuenta años, este tipo de matones a sueldo, sobre todo los procedentes de la vecina Satkia son frecuentemente contratados como guardaespaldas o ayudantes de cargos influyentes del ejército, ocupándose de las tareas menos agradables. Como es lógico, no todos los soldados ni oficiales del ejército vlinderi están de acuerdo con este tipo de prácticas por considerarlas deshonrosas, pero sus defensores argumentan firmemente que, en determinadas situaciones, reducen el riesgo de que miembros valiosos del cuerpo sean capturados y retenidos en territorio enemigo.

Los naraith: cuerpo de élite.

Los naraith u "hombres-víbora" constituyen uno de los grandes orgullos del país. Formados desde su más tierna infancia, solo 3 de cada 10 aspirantes consiguen superar todas las pruebas y ser marcados en la base del cráneo, justo sobre el comienzo de la columna vertebral, con el sello de este selecto grupo: un icosaedro con un ojo de serpiente delineado en su interior. Los naraith entrenan diariamente en el camino del Mei'n-We, alternando las horas de meditación con prácticas de esgrima, lucha cuerpo a cuerpo, orientación, espionaje y fabricación de ungüentos y venenos. Sus principales características: discretos, silenciosos y letales. 

Como peculiaridades con respecto a sus convicciones morales, decir que el arte del disfraz y el engaño solo está consentido si se presta a una causa superior y honorable. También, que amar y tener hijos está permitido pero no en el marco de un matrimonio. Un naraith se debe a su causa y su deber allá donde este lo reclame. En cuestión de sexo, los naraith son iniciados mediante un ritual secreto de la Orden a los dieciséis años, tanto chicos como chicas, mostrándoles así que dejar la virginidad atrás es un paso más para su madurez completa y que es algo que se encontrarán en el mundo que los espera, lo busquen o no*

*Por regla general, en Vlinder no se ponen reparos a la orientación sexual que uno desee, aunque hay algunos detractores de la homosexualidad y la bisexualidad que no ven estas prácticas con buenos ojos; pero, dado que la ley lo permite desde hace más de tres siglos y la ley de Vlinder obliga a respetar al prójimo, no suele haber problemas al respecto.





FAUNA

La fauna de Vlinder es tan variada como uno quiera imaginar. Podemos encontrarnos animales como los de nuestro mundo o incluso ligeramente diferentes, destacando dos en particular:

 Ihashi: son las monturas más utilizadas en Vlinder. De aspecto equino, poseen rayas y pezuñas hendidas, así como cuatro ojos situados dos a dos a cada lado de la cabeza y orejas pequeñas y triangulares. Su coloración o la disposición del rayado, así como la forma del cuerpo o la cabeza, pueden ser muy variados, dependiendo de los cruces y de las diversas razas.Domesticados hace cerca de 4.000 años, sirven también como alimento y como bestias de carga, quedando muy pocos ejemplares en libertad de la especie original, los Ihaushe. Estos se diferencian únicamente de sus primos domésticos en la coloración, que suele ser más oscura -tirando hacia marrón, verde y negro- para pasar desapercibidos en la naturaleza.

Waizu: ser con cuerpo de león, garras de águila y cola de escorpión, muy apreciado en las altas esferas como manjar guisado pero muy complicado de encontrar y cazar. Su hábitat más común suelen ser zonas montañosas y escarpadas, generalmente alejadas de cualquier núcleo urbano. Las hembras viven en grupos pequeños y los machos en soledad, buscando la manada solo para el apareamiento. 




FLORA

Como en el caso de la fauna, podemos encontrar plantas comunes de nuestro mundo, aunque dos especies destacan como especiales de la zona de Vlinder:

Arce pálido: árbol resinero típico de las zonas septentrionales de Vlinder. Es habitual verlo formando amplios bosques, generalmente entre zonas montañosas pero ocupando zonas llanas. A veces se forman grandes anillos de árboles alrededor de valles o incluso pequeñas sierras. Su resina es muy apreciada para diferentes usos, ya sean recreativos o industriales, como es el caso de la industria maderera, donde se utiliza para impermeabilizar muebles, instrumentos náuticos o incluso cascos de barcos.

Bambú dorado: utilizado frecuentemente para construir armas de entrenamiento o refugios de montaña, dada su elasticidad y resistencia. Habitual encontrarlo en zonas montañosas.




COMIDAS TÍPICAS

Guiso de Waizu: receta compleja elaborada a partir de carne de este animal y aderezado con algas de la costa sur de Vlinder, así como vegetales de secano y cereales. El mayor peligro de este apetitoso manjar es el veneno del Waizu, puesto que no desaparece solo al quitar el aguijón de la cola sino que es inherente a la sangre del propio animal. Conviene lavar la carne muy concienzudamente para que no haya rastro alguno de sangre al cocinarlo, ya que el veneno no se inactiva del todo con el calor y puede dar desde una indigestión severa hasta una parálisis completa y la muerte del individuo.




MODA (PRÓXIMAMENTE)


CUIDADES (PRÓXIMAMENTE)

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